Estirar la cuerda

Estiró
tanto la cuerda
que se ahogó completamente
en ella.
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Le ofrecieron lo que siempre
había deseado,
y se cagó por las patas abajo.
Y en vez de reflexionar al respecto,
no se le ocurrió otra cosa
-seguro que ayudad@ por su madre
y por su abuela-,
que limpiarse el culo con ello,
lo arrojó por el retrete y
¡no tiró de la cadena!.
No bastándole con un@,
ya tiene otro incauto
con quien repetir la faena.
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Fijaros
cómo es esta mujer:
prefiere que le escriban un poema
antes que vivirlo.
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¡HASTA LOS GÜEVOS DE TÍ!.
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¡Se acabó lo que se daba!
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ES LO QUE ES, HAY LO QUE HAY
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Fueron como una habitación de hotel sin pasado ni futuro,
fueron lo que fueron porque Dios ( qué diós ni qué leches) se empeñó en que fuera así.
No quedó como constancia de su encuentro más que el día, el año, el mes en la pared
escrito con las uñas en el yeso de aquel viejo hotel (¡Ojalá!)
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Los dos sabían que los lazos del amor se hacen de espino (¡No es cierto!).
Los dos sabían que quererse es condenarse hasta el final (¡para vosotr@s!).
Los dos sabían que a menudo no es bastante un "yo te quiero" (¡totalmente verdad!).
Pero vida no hay más que una y, que yo sepa, no dan más,
por ahora no dan más.
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Es lo que es, hay lo que hay. Por ahora no dan más.
Es lo que es, hay lo que hay. Por ahora no dan más.
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Y la noche de sus vidas se fue yendo como vino, en un susurro.
Si valió la pena o no, el tiempo dirá (¡seguro!).
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Se miraron a los ojos (¡Ella, nunca se atreverá!) hasta verse el uno al otro el corazón,
deseándose cuatro ases a la próxima ocasión (¡ni eso siquiera!).
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Los dos sabían que los lazos del amor se hacen de espino (¡que no es cierto!).
Los dos sabían que quererse es condenarse hasta el final (¡no es verdad!).
Los dos sabían que a menudo no es bastante un "yo te quiero" (¡lo sabrá algún día!).
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Pero vida no hay más que una y, que yo sepa, no dan más,
por ahora no dan más.
(Carlos Goñi)
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http://alcazaba.unex.es/~dcaceres/calley~1.html#1