4/10/06

Wüeblog nº¿?: ¡hasta los güevos!, IIIª parte.

¡Querida Carolina,
mnmnmn!, ¡qué buena que estás! –supuestamente, también supuestamente, vamos-. Qué chica (¿?) más maja, tanto, tanto, que ni siquiera unas “gracias” (aunque a algunos le hubiera gustado mejor un “buen” polvo, como esos que dices saber hacer, para que continúe tu vida haciéndolo cada vez mejor…) salieron de tu ¿linda? boquita dirigida a la persona –o personas- que te dieron el nombre con el que adquirirás fama mundial y por el que serás reconocida toda tu vida a partir de ya sabes cuando…, ¿verdad, “garganta profunda –o tal vez fuera Eso Lo Ke Tú Kisieras?, jajaja, jajaja, jajaja.

Otra que tal baila, ¿pero qué os pasa últimamente a las mujeres que, cuándo oléis un hombre como “debe ser”…, ¡¡¡salís corriendo!!!?. Mucho bla, bla, bla… y luego, ¡os cagáis por las patas abajo!; muchos centímetros ("ohoh, ahahahagggggggggggggggg") y huís como si la mismísima virgen María hubiera llamado a vuestra puerta. ¿Qué os gusta Satanás, decís?, ¿Qué sus cuernos, sus dos patas y su viril miembro os moja de tal manera que creéis que no seréis capaces de resistir al placer que ambos os daréis que preferís “desaparecer” antes que enfrentaros a vuestros miedos y quitaros las cadenas que os atan las alas?.

Mira, Carolina que, tal y como te expresas a través de la escritura, eres original, creativa, imaginativa, llena de fantasía, que sabes sacarle una morbosidad “espesial” a aquello que otr@s no somos capaces –aún- de ver, ni de observar, ni de maquinar… Pero bueno, sólo ahí, en el papel, después, cuando intentan tratar contigo, relacionarse vamos, tu parquedad, sequedad y… -me callo más cosicas- no tiene “paragón” – que no estoy pidiendo que me la chupes, o que me folles (si tú quieres, yo no te lo impediría, vamos- sólo deseaba conocerte –ya no sé si me interesas, vamos- y después, ya veríamos, eso sería llegar a acuerdos de los tantos que se producen con y sin palabras; con lengua o sin lengua; con polla o sin ella; con el coño mojado o seco; en fin, con muchas más actitudes positivas: está bien que te desprecies, e incluso que desprecies a quienes te hacen daño pero, ¿qué te he hecho yo para merecerme esto?. ¿Te he pedido, bruscamente o no, que me “hagas el amor” ("ohohoh, ahahah, aggggggggggggggggggg”). ¿Entonces a qué viene tu “mal rollo” conmigo?. En principio, parece que te gusta jugar x jugar pero, enseguida se da uno cuenta que, la brevedad de tus frases, deben ser una característica tuya general (¿por eso te gustan tanto -¡ja!, los pollones de elefante…?). Si es por eso, te puedo presentar a un amigo que tiene la mano el doble de grande que la mía… No, no se la he visto, me da igual, sin problemas, pero, por si te entra algo más el morbillo, es senegales, se ríe “pa” dentro, es muy, pero que muy inteligente –entre otras cosas, sabe 6 idiomas- y, además, es líder de un grupo de reage –al que, espero cambiarle el nombre, si me dejan claro-.
Bla, bla, bla, mira que te iba nombrar como “la mujer del bla, bla, bla…”, pero me sigo quedando con el primer nombre que me llegó intuitivamente: pinochilla y, visto lo visto, acerté de lleno a la primera, aunque a ti te gustó más la segunda, con lo que de negarle parecerte feo, pero que muy feo, le diste la vuelta de tal manera que, estoy seguro, le adoras como las niñitas que ser recrean con sus bucles saltando a la comba.
“Garganta profunda -LKTK- que no sólo de pollas -¡qué más quisieras tú, tururú!- vive la mujer: a veces, también, de ¡¡¡otras pollas!!!, jajaja, jajaja, jajaja (me parto escribiendo todo esto). Por cierto, pareces que llevas el mismo camino que tu progenitora: rechazo total a cualquier cosa porno, morbosa, placentera, orgásmica… etc, etc, etc. (ya sabes, el ego cuando se junta al miedo, o viceversa, nos hacen la vida casi imposible: creemos que todos los gatos -¡miauuuuuuu!, son pardos- y nuestras orejeras de burro –en este caso, burra- no nos dejan ni siquiera ver “tres en un burro”, jejeje.

Venga, y ya para acabar: a ti te va a costar más de el doble el que me quiera acostar contigo: mucho tendrás que trabajarme… pero bueno, quizás con una buena mamada –o dos o tres- me ablandes un poquito, jajaja, jajaja, jajaja (“ohohoh, ahahah, aggggggggggggggggggggg”).

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Buen blog, te invito a conocer el mío que está iniciándose. ;)

Kostas K. dijo...

Uno hace lo que puede, como los demás...
Abraciños, elíptico.