14/12/04

Ernesto Sábato (La resistencia)

Tan enardecidas fueron mis búsquedas que entonces no supe reconocer que era ésa la última vez que vería a mi madre sana, de pie, y que ese dolor perduraría para siempre, como hasta esa misma noche que entre lágrimas la recuerdo.
Entre lo que desamos vivir y el intrascendente ajetreo en que sucede la mayor parte de la vida se abre una cuña en el alma que separa al hombre de la felicidad como al exiliado de su tierra. Porque entonces, mientras mi madre quedaba detenida allí, inmóvil, no pudiendo retener a su hijo, no queriéndolo hacer, yo, sordo a la pequeñez de su reclamo, corría ya tras mi afiebradas utopías, creyendo que al hacerlo cumplía con mi vocación más profunda. Y aunque ni la ciencia, ni el surrealismo, ni mi compromiso con el movimiento revolucionario hayan saciado mi angustiosa sed de absoluto, reivindico el haber vivido entregado a lo que me apasionó. En este tránsito, impuro y contradictorio como son los atributos del mvimiento humano, me salvó un sentido intuitivo de la vida y una decisión desenfrenada ante lo que creía verdadero. La existencia, como al personaje de La náusea, se me aparecía como un insensato, gigantesco y gelatinoso laberinto; y como él, sentí la ansiedad de un orden puro, de una estructura de acero pulido, nítido y fuerte. Cuanto más me acosaban las tinieblas del mundo nocturno, más me aferraba al universo platónico, porque cuanto más grande es el tumulto interior, más nos sentimos inclinados a cerrarnos en algún orden. Y así, nuestras búsquedas, nuestros proyectos o trabajos nos quitan de ver los rostros que luego se nos aparecen como los verdaderos mensajeros de aquello mismo que buscábamos siendo a la vez, ellos, las personas a quienes nosotros deberíamos haber acompañado o protegido.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola!
Me llamo Maria, estoy haciendo una memoria para un master y mi tema es Ernesto Sabato, y al leer publicado un extracto de este libro en tu blog, se me ocurrio que quizas puedas ayudarme a encontrar autores que tambien hablen sobre esta obra, ¿Sabes de alguien (periodista, sociologo, filosofo, lo que sea) que haya publicado algun analisis sobre este libro?
Muchas gracias!

Kostas K. dijo...

Lo siento, María pero no puedo ayudarte en lo que me pides. El libro, me lo regaló un amigo hace años y, tras releerlo, me decidí tanscribir estos párrafos porque creo que dan una síntesis exacta de quienes persiguieron o perseguimos aún y, a pesar de todo, las utopías.
Saludillos, María.