a José Couso
No callarán tus ojos con el miedo,
no sellará tus labios la metralla,
no enterrarán tu voz ningún ejército
no vivirá en nosotros nunca,
nunca,
no daremos cobijo a la ignominia
salaremos los campos de la muerte
con las manos,
con las manos secantes de lágrimas.
Mataremos a gritos injusticias
con tu cámara José,
allá dónde te encuentres,
tu corazón diafragma
latirá entre los pueblos.
Anómimo
No hay comentarios:
Publicar un comentario